TALLER
DE ARMADO DE RUTINAS DE HUMOR+
VARIETE
DE CIERRE CON PUBLICO
Destinado a todo aquel artista que quiera armar rutinas de humor que funcionen, herramientas de trabajo para profesionales.
Jueves 18, viernes 19, sábado 20 de abril taller de 16 a 20hs
viernes 26 de abril 21hs
variete con publico.
LUGAR: Guapachoza - Jean Jaures 715- Abasto Buenos Aires-
Argentina
Inscripcion: 4.922 54 37
solo 10 vacantes y quedan 5!!!
VIDEO DE NÚMERO
RESULTADO DEL TALLER:
RESCATE EMOTIVO
(No
Pasa Res!)
ABRIL:
SABADO 20
A LAS 23 HS
Lugar: Guapachoza – Jean Jaurés 715 – Abasto – Buenos
Aries
Tel. 011 6091.4890 | reservas@guapachoza.com.ar
Localidades $50
Concepción,
dirección e interpretación: Walter Velázquez
Auspiciado por
la Asamblea
Permanente de los Derechos Humanos y por la Secretaría de Cultura de
la
Nación
Don Carlos Calostro Meconio, payaso argentino de 84 años se encuentra internado en una clínica
geriátrica, solo… Fue payaso
toda su vida, de las familias de payasos que comenzaron
la profesión en su país: Argentina.
No se sabe si no recibe visitas porque no
lo dejan recibirlas o porque esta solo…él dice tener ñietos…Pero no vienen nunca
a verlo.
No sabemos muy bien si es que tiene
familia o si es que ya nadie se acuerda de
él.
Don Carlos Calostro Meconio fue un
genial cantante solista que brilló
en
Orquestas típicas de Tango,
orquestas muy famosas y ya desaparecidas (las orquestas y los demás
integrantes)
Lo que si es cierto es que Hoy
Mismo, mientras UD lee estas líneas, Don Calostro esta planeando una gesta
heroica única:
Huir de la clínica
geriátrica…
Con la idea de pisar nuevamente los
escenarios del mundo, para que las nuevas generaciones sepan que los ancianos
tienen mucho para ofrecer, enseñar y compartir en este mundo pensado solo para
jóvenes.
Calostro está de vuelta!!..
Disfrútelo con alegría…
Calostro está de vuelta!!… No
sabemos hasta cuando.
Seguramente hasta que lo
encuentren.
Hágase cómplice de este RESCATE EMOTIVO…No Pasa
Res!
Críticas
Luis Mazas – Revista 23 – MUY
BUENO
TEATRO. CONMOVEDOR CIRCO DEL
MUNDO
Reímos por no poder
llorar
“…Velázquez carga un sólido
background sobre sus espaldas y si el espectador distraído lo ignora al inicio
de la función, pronto confirma que el teatrista es gran heredero de los
capocómicos de la tradición teatral porteña. Como ellos, atrapa la atención del
espectador y no la suelta hasta el final, a fuerza de compromiso y emotividad,
aun jugando un fondo amargo para examinar con agudeza la sinrazón del mundo;
incluido cierto sentido escatológico como arma revulsiva. Uno se pregunta cómo
Velázquez, que goza de prestigio y respeto de sus pares, no tiene aún la
popularidad general que merece, por su hermosa insensatez y
sensibilidad….”
Crítica por Pablo Gorlero-
La Nación-
MUY BUENA
http://www.lanacion.com.ar/1440396-rescate-emotivo-no-pasa-res
“…Un poquito de anécdotas, algo de memorabilia,
mucha poesía, chispazos de humor, y sobre todo, un abrazo gigante, inmenso, y
amoroso a la ancianidad (…) Velazquez logra una comunión fresca con el publico
en esta propuesta donde la consigna podría decirse que es “compartir”. Se
acompaña de buenos músicos, de invitados y de una pantalla en la que proyecta
vida… y algún que otro llamado de atención. Su segmento sobre la guerra es
elocuente y feroz. Ojalá vuelva con más funciones…”
Nota Página 12 – por Daniela
Rovina
TEATRO | "Rescate Emotivo" de Walter Velázquez | El ocaso de una vida
Por Guillermina
Gandola
“…El profesionalismo y la
trayectoria clownesca de Velázquez le permiten ser versátil, no solo desde la
palabra sino también desde su lenguaje corporal logrando (en cuestión de
segundos) hacer reír a carcajadas hasta desprender la lágrima más pesada. Una
vez que la voz de la experiencia sobre el mundo ha hablado, ya no es posible
hacerse el tonto, el desentendido sobre los problemas inherentes al ser humano y
a la “modernidad”.
Es que la risa muchas veces sale a
borbotones para tapar un dolor muy agudo como la muerte, la vejez, la insensatez
y la incertidumbre. Don Carlos es la risita histérica y desenfrenada frente a la
desesperación en un funeral, es la risa trasformada en atraco mientras la gente
come. Velázquez logra con gran elocuencia y humor exponer la realidad tal como
se presenta… Compleja y absurda. Con vejez, enfermedades, guerras constantes e
interminables mientras alguien escribe una reseña, se come un pedazo de pizza o
hace el amor…”
Rodolfo Weisskirch:
…En Rescate Emotivo, Walter Velazquez,
regresa con un personaje que ya ha llevado por España y Latinoamerica, un clown
oscuro y reflexivo, un anciano con memoria, que nos hace reir para no llorar,
pero principalmente es un espejo de la sociedad
contemporánea…
…Entre números tangueros
actualizados, y otros que no necesitan actualizarse, la performance de Velazquez
sobre el escenario es admirable. Interactuando con una pantalla, y con el
público rompe varias paredes...
...Rescate Emotivo es un espectáculo
fluído, reflexivo e inteligente, un monólogo que nos demuestra que el mundo no
es un lugar para reír, pero que una sonrisa es más poderosa que cualquier otra
arma…
Crítica por María de las Mercedes
Guidobono:
…“Rescate emotivo” es una obra para
los que tienen ganas de divertirse, sin dejar de reflexionar sobre la seriedad
de los temas que propone Velázquez…
…Recursos como el humor, la música,
la canción, y también invitados especiales que se presentan en el escenario,
proponen en “Rescate emotivo” una especie de colchón fantaseado, para que el
público pueda “caer” de manera amortiguada provocado por el “golpe” de la
realidad social en la que se vive.
En escena, todo el tiempo la fantasía, que permite al sujeto recibir con filtros un real imposible de tocar, de acceder, de comprender, de abordar. Un ida y vuelta, realidad y ficción, entre el personaje y el público.
Velázquez, con su excelente actuación, le pone el cuerpo todo el tiempo a esas preguntas existenciales que el ser humano se hace y paradójicamente, no se hace: ¿Por qué la muerte? ¿Por qué las guerras? ¿Por qué el joven no quiere saber sobre la vejez? ¿Por qué vivimos como si nunca fuésemos a ser viejos?...
En escena, todo el tiempo la fantasía, que permite al sujeto recibir con filtros un real imposible de tocar, de acceder, de comprender, de abordar. Un ida y vuelta, realidad y ficción, entre el personaje y el público.
Velázquez, con su excelente actuación, le pone el cuerpo todo el tiempo a esas preguntas existenciales que el ser humano se hace y paradójicamente, no se hace: ¿Por qué la muerte? ¿Por qué las guerras? ¿Por qué el joven no quiere saber sobre la vejez? ¿Por qué vivimos como si nunca fuésemos a ser viejos?...
Crítica
por Mariana Morieto:
…Emoción y ternura es lo que
despierta Don Carlos Calostro Meconio; un entrañable personaje interpretado con
mucha sensibilidad por el talentoso Walter Velázquez, quien de un modo creativo
y original logra darle cuerpo y vida a este payaso octogenario que posee una
extraordinaria capacidad para provocar diversas emociones en los espectadores,
llevándolos a reflexionar acerca de algunas cuestiones que en la cotidianeidad
se dan por verdades incuestionables…
…Además de los temas que se abordan,
y el magistral despliegue interpretativo de Walter Velázquez –de reconocida
trayectoria clownesca-, es para destacar la relación que el personaje establece
con el público. En principio, Don Carlos se dirige a un auditorio, que en el
contexto de la obra se halla integrado por el universo de los espectadores del
show de los viernes de este payaso cantor. Pero luego, ocurre un hecho
inesperado y por ello mismo sorprendente: Don Calostro baja del escenario para
dirigirse a cada uno de los espectadores, para conocerlos, para escuchar sus
voces, quiere saber sus nombres; incluso podría llegar a ofrecerles un pequeño
bocado. Y este acercamiento, a mi criterio, resulta uno de los pasajes más
interesantes de esta puesta, porque rompe la distancia habitualmente existente
en todo espectáculo entre el que habla y los que pasivamente escuchan. A través
de este acto Velázquez rompe las reglas, y con este gesto queda plasmado el
planteo medular de la obra: darle voz a los que generalmente no la tienen,
aquellos que permanecen en la penumbra y en silencio (los ancianos/ los
espectadores). Este giro, esta propuesta, me pareció un verdadero
hallazgo…
Crítica por Mónica
Berman:
…como cada grupo de espectadores es
distinto, cada función tendrá su particularidad porque como buen clown en ningún
momento deja de observar lo que sucede en la platea y si le sirve, lo aprovecha
(…) Walter Velázquez logra, como los grandes comediantes, hacer que uno pase de
la risa al nudo en la garganta sin solución de continuidad. Y no lo hace
sólo a través del discurso verbal sino
a partir de la construcción de un sistema que articula al payaso viejo en
escena, sus rasgos físicos, su problema con la contención urinaria, sus olvidos
recurrentes; los objetos vinculados con el universo de la vejez, extensiones de
un cuerpo que decae y se sostiene en otra cosa.
Rescate emotivo es un bellísimo trabajo, de
esos a los que no se asiste
indiferente sino que se los vive…
Crítica y entrevista a Walter
Velazquez por Azucena Ester Joffe: http://lunateatral.blogspot.com/2012/01/rescate-emotivo-no-pasa-res-de-walter.html
…Con
profesionalismo Walter Velázquez construye a este clown
reflexivo, un payaso para adultos que muestra cierto temor ante la inocencia de
los niños. Calostro desde el inicio de la obra
mira al público de manera insistente, pero su mirada no incomoda sino que crea
la complicidad necesaria con el espectador; su trabajo corporal da cuenta de la
preparación física y de la técnica vital para llevar el relato por un camino
zigzagueante y escabroso, con desvíos de humor. La participación del público es
espontánea y el intérprete está atento a cada simple
reacción…
por Meche
Martinez
“…Lo cierto es que este corazón tan sensible,
logra emocionar desde el humor, y vaya capacidad que ha construido en este
“Rescate emotivo”, una recopilación de vivencias, de historia y sumado a esta
entrega artística, haga que pasemos un momento muy divertido. ¡Muy bueno! ¡Para
ver siempre y donde esté! …”
María
Jimena López: (Asistencia de dirección)
Ricardo
Sica: (Iluminación)
Soledad
Galarce- Melania Lenoir: Alfiler de Gancho-(Vestuario)
Luis
Sticco: (Arreglos musicales)
Valeria
Stilman: (Dibujos)
Capear!
Martin Acosta: (Diseño gráfico)
Alejandro
Palacios: (Fotografía)
Andrea
Feiguin: (Producción Ejecutiva)
Calostro
fue payaso toda su vida, de las familias de payasos que comenzaron la profesión
en su país: Argentina. No se sabe si
no recibe visitas porque no lo dejan recibirlas o porque esta solo…él dice tener
nietos…Pero no vienen nunca a verlo.
No
sabemos muy bien si es que tiene familia o si es que ya nadie se acuerda de
él.
Don
Carlos Calostro Meconio fue un genial cantante solista que brilló
en
Orquestas
típicas de Tango, orquestas muy famosas y ya desaparecidas (las orquestas y los
demás integrantes)
Lo
que si es cierto es que Hoy Mismo, mientras UD lee estas líneas, Don Calostro
esta planeando una gesta heroica única:
Huir
de la clínica geriátrica…
Con
la idea de pisar nuevamente los escenarios del mundo, para que las nuevas
generaciones sepan que los ancianos tienen mucho para ofrecer, enseñar y
compartir en este mundo pensado solo para jóvenes.
Calostro
está de vuelta!!.. Disfrútelo con alegría…
Calostro
está de vuelta!!… No sabemos hasta cuando.
Seguramente
hasta que lo encuentren.
Este
espectáculo cuenta con el apoyo de
Proteatro.
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